En Vaca Muerta, la inteligencia artificial se abre paso en cada vez más procesos

Si bien la inteligencia artificial tiene muchos años de aplicación en distintas industria, en la sociedad caló hondo con las herramientas de Open AI como Chat GPT. La tecnología sigue creciendo y perfeccionándose, por lo que cada vez más empresas de petróleo y gas la están viendo con interés debido al gran flujo de datos que manejan de manera interna.

Después de la pandemia, las petroleras aceleraron la digitalización de muchos procesos y de a poco empezaron a implementar pilotos. Así las pymes tecnológicas pudieron hacerse un lugar en los yacimientos de Vaca Muerta, los de mayor crecimiento en la última década.

"Las empresas, tanto operadoras como de servicios, tienen una gran cantidad de datos con los que monitorean o hacen reportes, pero faltaba un estudio profundo del porqué pasan las cosas, de las relaciones entre una variable y otra", comenta Federico Silva, de Delta-IA, en diálogo con Mejor Energía.

Justamente, Delta-IA es una joven pyme que surgió de estas oportunidades que generaban los datos. Es así que hace poco más de un año Silva decidió fundar con Pablo Barbero (con quien comparte experiencia en el oil & gas) y Leopoldo Gómez (doctor en Física) esta compañía.

Como el background de Silva y Barbero estaba en los servicios, los primeros contactos de la nueva empresa fue con ese tipo de prestadoras con soluciones para cementación y fractura. "El hecho de poder entrenar un modelo y que después ese modelo entrenado pueda ir diciendo cómo se va a comportar la etapa de fractura que sigue es increíble", apuntó Silva en el diálogo con este medio.

Pero los datos de las petroleras no se quedan en la parte "fierrera", sino que hasta en las conversaciones para presentar propuestas surgieron inquietudes sobre los recursos humanos. Por caso, con una importante operadora generaron una aplicación para optimizar las vacaciones, licencias y días caídos que le permitió dejar de perder dos millones de dólares anuales.

Silva explicó que con los datos de salud puede hacerse un registro de los trabajadores de una empresa y monitorearlos en su beneficio. "Está bueno incluso irse hasta el preocupacional, incluso con el paso del tiempo hasta avisarles que se hagan algún chequeo. O ir detectando las consecuencias que suele tener el propio trabajo y las enfermedades más comunes, con el objetivo de prevenirlas o evitarlas", destacó.

"Podemos hablar de cualquier cosa y siempre que haya datos, se puede generar desde un modelo", añadió Leonardo. El físico también recuerda que hubo un cambio de perspectiva de parte de las empresas, todas con un plan de digitalización y con la necesidad de ir más rápido hacia nuevas tecnologías como es el análisis de datos y la inteligencia artificial.

De hecho, Delta-IA está trabajando en un ChatBot personalizado con las bases de datos, ajustado al cliente, de manera de convertirlo en un asistente virtual para las áreas que requieran una respuesta veloz, eficaz y certera.

Más allá de lo asombroso del avance y las facilidades que genera: ¿Las empresas también se cuestionan si esto puede perjudicarlas en materia de puestos de trabajo? "Pensé que iba a haber más reticencia en el sentido de que la gente iba a estar más preocupada por su trabajo futuro, sin embargo hasta ahora no ha pasado", afirmó Barbero. "Siendo realistas, hay tareas que son reemplazables, pero hay una parte de entrenamiento y no se puede saltar de un momento a otro, digamos", agregó.

"El nuevo paradigma es ir dejando de lado un poquito las emociones y basarse en los datos, buscando el punto óptimo. Además, es un proceso que permite tomar las mejores decisiones y te da una mano para mirar de una forma imparcial y objetiva, porque estás basado puramento en datos. Creo que esto va a cambiar muchas cosas en el futuro", subrayó Silva.